13 de marzo de 2016

Padawan descalza

No me creo lo que estoy viendo; no sólo no has cerrado la pestaña del blog al encender el ordenador, sino que también te vas a poner a escribir.

Y ese asombro, ¿a qué viene?

Dímelo tú. ¿Cuándo es la última vez que escribiste en el blog?

Hace un par de semanas creo que publiqué un post.

Pero ese no cuenta.

¿Por qué?

Porque no lo escribiste desde el ordenador.

Pero la pregunta no era esa, me preguntaste por la última vez que escribí y no desde dónde lo escribí.

Bueno, da igual. El caso es que nunca te has tirado tanto tiempo sin escribir en el blog. 

¿Y desde cuándo eso es un problema para ti?

Por desgracia, desde que decidí hablar contigo.

Pero no habíamos quedado en que soy una borde (contigo porque a PD parece que le caigo bien), una pesada, una desorganizada, una indecisa, una insegura, etc...

Eso te lo has dicho tú solita.

Tú no lo has insinuado nunca ni me lo has dicho directamente.

Bueno... Igual sí, pero no con esas palabras. 

Precisamente esas palabras no, pero el significado era muy similar.

Me dirás que no llevo razón.

No siempre.

¿Cómo?

Hay veces que sí la llevas.

Puedes repetir eso, ¿por favor?

Hay veces que llevas razón.

¿Y eso lo has descubierto tú sola o hay alguien te lo ha dicho?

Yo solita. No es malo reconocer los errores que cometo.

No digo que sea malo, sólo que me sorprende que reconozcas tener defectos.

Tengo menos defectos de los que tú piensas. ¿Qué tiene de malo ser desordenada?

Que no hay quien encuentre tus cosas.

Con encontrarlas yo, me sobra.

Pero es que hay veces que no las encuentras.

Son detalles.

¿Cómo tienes el escritorio de la universidad?

Más colocado que el de mi habitación. En mi defensa, estas semanas anteriores ha estado más desordenado que el viernes cuando la limpié.

Solo faltaba que limpiándola quedase peor. 

Puede ocurrir.

¿Y qué me dices de borrar los post?

Es un clásico, ya deberías estar acostumbrado.

Si sabes que lo vas a borrar, no lo escribas, guárdalo como borrador, o al menos no lo publiques. Como la última vez.

Pero eso no siempre funciona. Hay post que no quiero borrar, al menos por ahora, y hay otros que desearía no haber publicado.

Mmm... No me convence esa explicación.

Ni esa ni ninguna. Oye, ¿por qué estás tan raro?

Es que hacía mucho tiempo que no hablabas conmigo.

¿Me echabas de menos?

Un poco...

Así que no soy tan mala después de todo.

Yo no dije que fueras mala...

EJEM...

Bueno... igual un poco. 

¿Y...?

Vale, quizá me equivoque al principio....

¿Y...?

¡NO PIENSO DECIRLO!

¿Decir el qué?

Lo que quieres que diga.

¿Y qué es lo que quiero que digas?

¡¡ERES INSOPORTABLE!!

No estaba pensando en eso.

¿No tienes otra cosa mejor que hacer?

Ahora que se ha puesto interesante la conversación, no.

...









Sigo esperando...

¿A qué?

Ya sabes a lo que me refiero.

Te lo dije muchas veces.

Mentira.

¿Alguna vez?

Como sigas así no me lo vas a decir ni una sola vez.

No eres mala.

¿Y...?

¡¡¡QUÉ GANAS TENGO DE QUE TE VAYAS DE UNA VEZ!!!

Joder, ¿tan difícil es decir algo bueno?

Tienes tatuajes.

Me he perdido. ¿Acaso tiene algo de malo?

No, supongo. 



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