En
la clase de hoy de PDD, hemos estado hablando de estos conceptos. Al principio
de la clase, tenía mi propia interpretación o mi
propia expectativa de lo que querían decir cada una de ellas, pero
conforme avanzaba la clase iba cambiando mi interpretación de cada una de ella.
En eso mismo consisten, es decir, cuando asimilé los conceptos
de asimilación y acomodación los relacioné con mi
propia experiencia, con lo que ya sabía de cada una de ellas. Pero hasta que no
las entendí del todo no las acomodé o adapté a la realidad.
Un
ejemplo más práctico, si Pedro sabe que hacer algo deporte es bueno para su
salud pero en cambio, pone excusas, es decir, adapta el proceso de hacer
deporte a su caso particular y hace siempre lo mismo, nunca va a cambiar. Pero,
un buen día, decide hacer deporte, implica que Pedro ha dado el paso de asimilación a acomodación.
Aunque
no sea conscientemente, Pedro llevó a cabo un proceso en el que sus
expectativas (feedforward) y su información de vuelta (feedback)
se veían influidas mutuamente. Si las expectativas que tiene Pedro para llevar
una vida sana se corresponden con la información que obtiene, es decir,
observa una mejora en su vida cotidiana después de hacer deporte, se dice que
ha conseguido un feedback positivo ya que se corresponde con
las expectativas que tenía Pedro. En cambio, si cuando está haciendo deporte,
Pedro se rompe una pierna, va a pensar que hacer deporte es malo y va a volver
a su posición inicial, es decir, pensar que hacer deporte es bueno para la
salud pero como se rompió una pierna no lo va a volver a hacer. En este caso se
denomina feedback negativo. Siento poner un ejemplo un tanto...
peculiar pero creo que se ve claro lo que quiero decir.
En el caso, de que Pedro no tuviera una expectativa, es decir, hiciera deporte por placer y no por el hecho de que sea saludable, las consecuencias, o dicho de otro modo, la información de vuelta no existiría. Sin expectativa no hay información de vuelta, sin feedforward no hay feedback.
A
nivel personal, cuando me dan alguna sorpresa o simplemente no sé lo que voy a
hacer en el día, me motivo pensando en las cosas que quiero hacer pero me suelo
desilusionar con facilidad porque no hice ni la mitad de lo que quería hacer.
En cambio, otros días me llevo una grata sorpresa cuando me sobra tiempo para
hacer lo que quiero hacer. En este sentido, suelo tener mucha imaginación para
saber lo que va a ocurrir aunque prefiero sorprenderme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario