En
la sesión práctica de hoy de PDE, hemos visto un vídeo para poder aplicar la
teoría del martes y observar si el conductismo puede ayudar a mejorar las
conductas de los niños, y si lo hace, durante cuánto tiempo, es decir, si
dichos cambios en la conducta se prolongan a lo largo del tiempo o no.
En
el vídeo se mostraba el comportamiento de dos hermanos de edades cercanas así
como también el comportamiento de los padres. La conducta que tengan los padres
frente a solucionar los problemas condicionará la manera tanto de hablar como
de pedir las cosas de sus hijos.
Por
ejemplo, en el vídeo el hermano mayor hace lo que quiere y cuando quiere.
Frente a eso tiene dos posiciones totalmente opuestas pero que tienen las
mismas reacciones ene hijo. Mientras que la madre intenta imponer normas,
el padre le ríe las gracias a su hijo, perdiendo la autoridad como padre y
pudiendo influir en la pérdida de autoridad en el futuro. Si esta situación
continúa así puede provocar cambios irreversibles en el comportamiento del hijo
mayor y que, a su vez, puede influir en el comportamiento que tenga su hermano
pequeño en un futuro, ya que si ve que a su hermano le funciona, él va a seguir
el mismo patrón.
Considero
que hasta que los padres no se pongan de acuerdo en la manera en la que quieren
educar a sus hijos no van a poder llevarlo a cabo. Así mismo, tanto el
rol de la madre como el del padre si siguen así, donde ella impone pero él no
se lo toma en serio puede llegar a repercutir negativamente en su
relación.
En
ocasiones es difícil actuar porque los padres no son muy conscientes de que
verdaderamente hay un problema de trasfondo o que ellos mismos son los
causantes de que su hijo se comporte de esa manera. Es un aspecto duro de
tratar con los padres pero es muy importante que sean conscientes de este
hecho, no hay un libro lo suficientemente bueno que explique cómo educar a un
hijo o cuál es la mejor forma de hacerlo, al menos no considero a nivel
personal que un única manera de educar a los niños eficaz y factible.
Como
dice el refrán "cada maestrillo tiene su librillo". Por ejemplo, mis
dos hermanos y yo somos muy distintos y no hemos tenido la misma conducta, pese
a que la educación inculcada por nuestros padres fuera la misma. El mayor era
muy bueno tanto en casa como en la escuela o fuera de casa, el mediano era más
revoltoso no en casa ni fuera sino en el colegio y yo era revoltosa en casa y
fuera pero en el colegio no lo era. Algo que me llama mucho la atención del
colegio fue una vez que estuve en clase con la profesora del mediano por una
guardia y me dijo algo parecido a "¡Qué diferencia entre uno y
otro!".
Lo
que quiero decir es que por mucho que pretendas, tanto desde el punto de vista
del docente como desde el punto de vista de las familias, educar a tus hijos o
alumnos de la misma manera no vas a obtener los mismos resultados.
Puede
resultar, y en la mayoría de los casos ocurre así, molesto para los padres el hecho
de que alguien les diga que sus hijos son de una determinada manera o que
ellos mismos tienen la culpa de que sus hijos se comporten así. Dicen que
cuando seas madre comerás huevos, y lo cierto es que aunque no lo soy sí
entiendo su situación, aunque quizá desde otro punto de vista.
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