Cuando
me puse a pensar cómo hacer este post, no me acordaba del título pero si de una
frase de Groucho Marx y estuve buscándola. El caso es que salieron varias suyas
y me hicieron bastante gracia. Hay una que dice "Fuera del perro, un libro es probablemente el mejor amigo del hombre, y
dentro del perro probablemente está demasiado oscuro para leer".
Quitando la broma, la frase a la que hacía referencia ("Estos son
mis principios. Si no le gustan tengo otros"), en cierto modo, es un
resumen de una parte de la clase de hoy de PDD y es el título de este post, los
principios.
El
tema de los principios venía como reflexión y parte teórica de los dilemas
morales. Cuando estableces una relación con alguien durante un periodo de
tiempo más o menos largo, se forman relaciones estables. Al principio las
establecemos con las personas con las que convivimos, hermanos, primos, padres
y posteriormente con gente de confianza como los amigos o la pareja.
Centrándome en el caso de los niños, los hermanos mayores suelen ser los
cómplices de los hermanos pequeños y los que deben guiar y enseñar cómo y
porque deben hacer las cosas para en el día de mañana ser autónomos. En algunos
casos, son los propios hermanos mayores los que cuentas las fechorías que los
pequeños han hecho comunicándoselo a la madre.
Sin
embargo, en otros casos, los hermanos mayores son los encargados de los
hermanos pequeños cojan confianza con sus padres y sean ellos mismos los que se
lo digan a sus padres, sin necesidad, o sí al principio, de estar presentes los
hermanos mayores.
Cada
uno de nosotros tiene una serie de principios, normas, leyes que fueron
establecidas por el sentido común gracias a la experiencias personales que haya
tenido. Pero eso no significa que unas sean mejores o peores que otras,
simplemente son distintos. Las comparaciones son odiosas. Hay varios caminos
para llegar a un mismo lugar, pero que más gente opte por un camino no le hace
ser el mejor camino, o por el único que se debe pasar.
Por
ejemplo, en matemáticas lo que importa es el resultado a un problema
determinado, sin embargo hay varios caminos para obtener el mismo resultado. En
cambio, hay en determinados aspectos y situaciones de la vida que, a nivel
personal, no considero que los caminos sean tan iguales o dignos para conseguir
un fin determinado.
Un
ejemplo de ello, y visto desde el punto de vista de un estudiante, es el hecho
de copiar en un examen. Nunca lo hice ni lo haré porque me estaría engañando a
mí misma y de cierto modo limitándome ya que estoy dando por hecho que no voy a
llegar a un nivel determinado. Lo que me molesta es que, para un examen de
historia, por ejemplo, me tire estudiando dos semanas enteras y la gente se
haga una chuleta y sin estudiar saque más nota que yo. No copio porque va
en contra de mis principios, o lo que yo considero "normal". Pero una
cosa es que me moleste y otra es que diga algo al respecto, es decir, intente
imponer mis propias normas, mis propios principios. Quien piensa diferente o
defiende unos intereses no tiene por qué ser inferior o superior a otro que
defiende intereses totalmente opuestos y contradictorios. En la variedad está
el gusto.
Por
ejemplo, mi hermano es acérrimo del Real Madrid, hasta puntos que considero muy
pantanosos. Cuando juega contra el Barça y su equipo pierde, también lo hace sus
papeles, es decir, se desfoga haciendo cosas que no haría en condiciones
normales. Me resulta gracioso porque el resultado de ese partido, digo ese
porque es el que más rabia le da perder y ganar, le condiciona su forma de ser.
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